RESUMEN
La presente investigación tiene como objetivo,
encontrar las formas que adoptan las relaciones de amor entre la juventud
adolescente, hombres y mujeres, que estudia en la Preparatoria Regional
de Tejupilco, diferenciando aquellos que
tienen pareja, con los que no tienen relación de pareja.
La tesis trata dos conceptos que admiten muchas y
variadas definiciones: el amor y la adolescencia. El estudio se enfoca a
determinar qué relación existe entre ambas variables y los estilos del amor de acuerdo
al modelo de Sternberg. La investigación realizada se diseño, sobre la base
teórica de la escala de actitud ante el amor.
La primera parte de la tesis se dedica a señalar las
múltiples opiniones y puntos de vista que existen sobre el amor. El recorrido a
través de los autores consultados, permitió entender como materia de estudio,
al amor como un concepto romántico, el de los sentimientos, afectos, necesidad,
compañía, placer y sexo. Son los parámetros que sirven para explicar tanto los
componentes, como los estilos del amor en que se basa el cuestionario aplicado
a 295 alumnos, de los cuales 149 corresponden al sexo femenino y el resto al
sexo masculino.
Los resultados obtenidos indican que existen diferencias
en los estilos del amor y en los componentes del mismo, tanto por
género, como por el estado sentimental de los adolescentes, ya sea en pareja o
sin pareja. En la parte final del presente trabajo, se analizan los datos obtenidos, se comparan
los resultados y se discuten las conclusiones, recomendaciones y sugerencias
que se desprenden de la investigación.
Si bien el modelo de Sternberg no es suficiente per se, para explicar completamente un sentimiento de vital
importancia, en un segmento tan relevante de la sociedad, si dio lugar a
descubrir campos para reflexionar, sobre la importancia del tema, la necesidad
de ampliar las herramientas de investigación y la urgente participación de
familia y docentes, en el tratamiento de las relaciones de amor, en el mundo
adolescente.
INTRODUCCIÓN.
En uno de los diálogos de Platón,
el de Fedro o del Banquete, Aristófanes explica el nacimiento del amor
entre los seres humanos, con el mito de una primitiva naturaleza humana, en
donde no eran dos sino tres los géneros, todos alojados en un solo ser. De cuatro patas, manos, orejas y rostros, de
cuerpos redondos, altivos y ensoberbecidos, al grado de pretender atentar
contra los dioses del Olimpo. Zeus, en vez de acabar con el linaje que lo
veneraba, como lo hiciera antes con los Gigantes de Gea, decide enviar un rayo
que parte en dos a los súbditos y los vuelve frágiles. Apolo se encargara de
modificar al producto resultante, los endereza, voltea, los tuerce, hasta
terminar con el ombligo, como zurcido final. Desde entonces, cuenta
Aristófanes, cada parte resultante, cada sexo dividido anda en busca de su
contraparte, pues sienten y piensan que no son nadie, sin el complemento de lo
que alguna vez fueron estos seres primitivos.
La cara opuesta al asunto del amor
aparece en Aristóteles, discípulo de Platón, pero quien distinguía en la
amistad, las diferencias de edades géneros y deseos. Una era la amistad por
placer, la de los jóvenes y del cuerpo, la del gusto; otra, la amistad por
interés, la de necesidad, la amistad de los viejos. En medio, como método del
estagirita, aparece la amistad virtuosa, aquella que es placentera y es
necesaria, pero sobretodo y antes que nada es recíproca, buena y agradable
Son los romanos quienes acuñan la
palabra amor, de donde derivarían las voces amica o novia y de allí
amigos; y de la bella palabra amare, de tonos afectivos, gusto, romance
y sexualidad, lejos del concepto básico de la amistad y la virtud requerida.
En Occidente por la corrupción que
la escolástica cometió contra la
Filosofía, prevaleció el sentido del amor platónico, basado
en la pasión placentera, el sentido ideal, el sufrimiento gustoso, la necesaria
comunión, de unidad y dolor, el amor apasionado, el juvenil, del cuerpo. El
mundo vulgar se atoró en la atracción anatómica, en desuso del deseo noble del
alma.
Sea por el sentido de búsqueda y
comunión, o por la intención amistosa, el amor es base y esencia de las
relaciones humanas. Porque el amor es el medio a través del cual conviven las
personas, se reproducen y aseguran la continuidad de razas y especies, se
organizan social y políticamente, encuentran la alegría o la tristeza, hacen el
bien o el mal; más bien parecería necesario tratar este fundamental sentimiento
como las matemáticas hacen con los sistemas numéricos: clasificándolos en
números reales e imaginarios.
Hay que dejar el amor imaginario
para poetas como Stendhal, quien en su célebre obra titulada Del Amor,
aborda este tema como un teorema matemático y detenerse en la psicología del amor, donde todas aquellas
expresiones de la naturaleza humana puedan ser identificadas, medidas,
tipificadas, comparadas, generalizadas: para poder entender y explicar este
noble y princeps sentimiento humano, en la realidad cotidiana.
Y centrarse en el momento vital en
que nace el amor real, en los hombres y mujeres que aún no terminan de
formarse. Descubrir en la adolescencia,
la etapa en que se da el crecimiento y desarrollo de cuerpo y alma. Del
“estirón” y conformación plena del cuerpo final, simultáneamente con el
surgimiento de la conciencia y el instinto de la pasión amorosa. Suma de
alteraciones químicas y físicas, combinadas con otras igualmente importantes y
delicadas en la psicología de los adolescentes. Si las primeras son
determinantes para asegurar la salud física, lo segundo es esencial para
alcanzar la salud mental.
Por la importancia
que representa el amor para todos, y porque es en la adolescencia donde nace el
sentimiento que se entiende realmente como amor, es la razón en donde surge el
interés por desarrollar esta tesis, que se plantea el estudio de los estilos
del amor, entre los adolescentes que estudian en la Preparatoria Regional
de Tejupilco A.C.
EL AMOR
1.1 MARCO
TEÓRICO
El amor es un concepto universal relativo a
la afinidad entre seres, definido de diversas formas según las diferentes
ideologías, costumbres, carácter, puntos de vista, regiones y países.
Habitualmente y fundamentalmente en Occidente, el amor se interpreta como un
sentimiento relacionado con el afecto y el apego, producto de una serie de
emociones, experiencias y actitudes. Cabe señalar que la palabra amor tiene una
etimología que la relaciona con el sentido estricto de la voz amor en lengua latina.
No obstante existen variaciones que la emparentan con las palabras Amo y
Muerte, aunque tal vez el mejor sentido sea el que explica el origen primero,
en la raíz indoeuropea amma que significaría Mamá, Es claro que al decir
amor se abarca una gran cantidad de sentimientos diferentes, desde el deseo
pasional y de intimidad del amor romántico, hasta la proximidad emocional
asexual del amor familiar y el amor ideal e incluso el amor religioso.
El amor en sus diversas formas actúa como medio
de singular importancia, en las relaciones entre las personas y, por la
importancia psicológica central, es uno de los temas más frecuentes en los productos
creados por el espíritu humano.
Para la ciencia, el amor constituye un
proceso que ha evolucionado del primitivo instinto de supervivencia, que
mantenía a los seres humanos unidos y organizados, ante las amenazas externas a
las ciudades primarias, y que permitía y facilitaba la continuación de la
especie, mediante la reproducción.
En la familia es donde se crean los vínculos
afectivos iniciales y naturales, de dependencia emocional con las personas más
cercanas. Con los padres, los hermanos y parientes, después con los amigos y en la edad adulta con las
parejas. Son vínculos que ayudan a que las personas aprendan y comiencen a
crecer individualmente, a pesar de que estas relaciones puedan llegar a ser un
problema cuando se transformen en formas de dependencia, de necesidad o de
impotencia, que impidan el desarrollo en la vida como seres independientes y
libres.
El amor es un desafío constante; no un lugar de
reposo, sino un moverse, crecer, trabajar junto a otros. Que exista armonía o
conflicto, alegría o tristeza, es
secundario con respecto al hecho fundamental, de que dos seres se experimentan
desde la esencia de su existencia.
1.2.- DEFINICIÓN DE AMOR
Popularmente, el amor se considera
un sentimiento. En los casos más comunes, dicho sentimiento se basa en la
atracción y la admiración de un sujeto hacia otro. Habitualmente se asocia el
término con el amor romántico, una relación pasional y sexual entre dos
personas que produce una influencia muy importante en sus vidas
Para Rozzana
Sánchez (2007), el amor es una de las
emociones más complejas e importantes
para las personas, mientras que Erich
Fromm (2007), señala que el amor está vinculado con grandes alegrías y
decepciones, sentidas a lo largo de la vida.
Aunque también, el amor es entendido como una actitud positiva o de
atracción, que incluye la predisposición
a pensar, sentir y comportarse de un
cierto modo hacia la otra persona,
afirman a su vez Peele y Brodsky (1975).
Para
Robert Sternberg (1989), el amor es una de las más intensas y deseables
emociones humanas, capaz de provocar que las personas lleguen a mentir, engañar
y aún matar en su nombre y desear la muerte, incluso cuando lo pierden. De
acuerdo a ese autor, el amor puede abrumar a cualquiera, a cualquier edad,
porque el amor implica combinaciones de intimidad, pasión y compromiso.
Ingredientes de esta pasión que cambian en relación a diferentes momentos
históricos, lugares geográficos y culturas.
Y aunque la mayoría de las personas creen que
amar es algo sencillo, en verdad que no saben que lo más difícil es encontrar
alguien amable para poder amarle o para poder ser amado. Es por ello que Rozzana Sánchez, establece que el amor responde a
las necesidades del otro, mediante la expresión de afecto físico y de cuidado
para con él. En cambio Montagu, señala
que el amor es un involucramiento incondicional y protector entre dos partes,
que contribuyen mutuamente a su bienestar y desarrollo, aunque también se le
puede considerar como cualquier tipo de conducta que acerca a las personas,
física, emocional, cognoscitiva, social y espiritualmente. Para otros como Gaja,
(1995), el amor es un sentimiento agradable hacia otra persona
que se manifiesta por la comprensión, la complicidad, el entendimiento,
la pasión y en definitiva, por las
habilidades de convivencia.
El amor dicen otros, es aquello que puede sanar y curar
heridas, y que de alguna manera permite
valorar a las demás personas por lo que son. De esta manera se puede lograr
amar a las demás personas, aun cuando
parezca ir en sentido contrario al amor de sí mismos. Ya que el amar es
pertenecer, entregar, recibir y abrigar
a la otra persona y de igual manera sentirse amados por los demás.
Porque es de esta manera que el amor
logra conmover y vencer al dolor
y a la pérdida.
De alguna forma, el amor es considerado como aquel
sentimiento que se preocupa por las necesidades de la otra persona, a través de
cuidados para la pareja, porque el amor
puede ser un compromiso incondicional y protector entre dos partes, que contribuyen
mutuamente a su bienestar y desarrollo mutuo.
El amor es aquel sentimiento, deseo, impulso de afecto
y ternura que se manifiesta a través del comportamiento hacia una persona, cuya
consecuencia hace que loa enamorados se acerquen más, unas a las otras, sea
esto física, emocional, social o espiritualmente.
Se sabe que la palabra amor
proviene del latín, amor, amoríos, que comprende
una gran cantidad de sentimientos diferentes, desde el deseo pasional y de la
intimidad, del amor romántico, hasta la proximidad emocional asexual del amor familiar y el amor platónico[ ]y y la profunda unidad o devoción del amor religioso.[ ]En
esta parte, el amor trasciende del sentimiento y pasa a considerarse la
manifestación (Gaja, Op cit.) de un estado de la mente o del alma, identificada en algunas religiones con Dios mismo y con la fuerza que mantiene unido al universo.
Nuevamente en Fromm
(Op cit.) se menciona que el sentimiento
de “Amor es una actividad, no un efecto pasivo” En el sentido más general, el
carácter activo del amor es fundamentalmente el dar, no recibir. En el carácter
activo del amor se vuelve evidente la presencia de ciertos elementos básicos,
comunes a todas las formas del amor. Estos elementos son: cuidado,
responsabilidad, respeto y conocimiento.
Silvia Ubillos
y Elena, Zubieta; se unen a las definiciones para describir al amor como el uso
más humano y más profundo de la voluntad de amar, es un acto de la persona y
por eso, ante todo se dirige a las demás personas. Más agregan una variable
novedosa y contundente, al decir que el amor hace que la vida merezca la pena,
no es un sentimiento, sino un acto de la voluntad, acompañado por un
sentimiento. Es decir, se ama porque se quiere, porque su voluntad es de sí
mismos y porque desean amar y ser amados. Otros afirman que el amor es el
sentimiento que guía los pensamientos y las conductas dentro de una relación de
pareja.
Nuevamente Rozzana Sánchez
(Op cit.) señala que el amor es un involucramiento incondicional y protector
entre dos partes que contribuyen mutuamente a su bienestar y desarrollo, aunque también se le puede considerar como
cualquier tipo de conducta que acerca a las personas, manifestando la comprensión, complicidad, entendimiento,
la pasión y las habilidades de convivencia.
1.3.- CLASIFICACIÓN DEL AMOR
Para efectos de este
estudio, se utilizó la clasificación del amor, desarrollada por Hendrick S.S & Hendrick
C (1989), por Fricker - Moore, et. Al, (2002) y por Lee (1973) y que se divide en seis estilos de amor
diferentes: Eros, Ludus, Storge, Pragmático, Manía y el Ágape.
EROS: Es el
amor apasionado y romántico. Se caracteriza por
la atracción física y sexual, la pasión, la comunicación abierta y el
compromiso con el amante. Este estilo de amor involucra la necesidad de una
atracción intensa tanto física como emocional, por la imagen del compañero
También Sánchez Aragón, (Op. cit), menciona que
en este estilo de amor, los amantes saben lo que quieren y van en
busca de esas cualidades específicas, ya que, por lo general tienen mucha
seguridad en sí mismos, y son personas que creen en el amor a primera vista,
que sienten una atracción inmediata por el otro. Es un estilo de amor, en
el que realmente se refleja el
enamoramiento en las parejas y se
fortalece la duración de la misma relación.
De la misma manera; Díaz
Loving (2009), menciona que el estilo de
amor Eros, se enfoca en la belleza relativa
del objeto de amor, su síntoma es la atracción física inmediata, y la
motivación principal es en el plano sexual. Que inicia con una gran ansiedad y
después se conocen y disfrutan hasta llegar al desencantamiento.
Se puede deducir entonces que para estos
autores, el estilo de amor Eros es aquel
sentimiento en el cual existe romanticismo y la atracción sexual por la pareja,
reflejando así mismo el enamoramiento en ambas partes.
LUDUS: Es, en
cambio la manifestación de un espíritu libre de amor, por lo que las personas
que gustan de este estilo, ven al amor
como un juego, un entretenimiento. Se
caracteriza por ser un amor permisivo, no hay compromiso, inexistencia de
celos, hay poca implicación emocional,
no hay expectativas futuras y pueden existir múltiples parejas al mismo tiempo (Büyükflahin y Hovardaolu, (2004).
En este
estilo de amor se espera que la pareja entienda las reglas relativas, y tanto
el amor como el sexo son vistos como un juego, como una diversión. Una de las
características de este estilo de amor, es que los agentes que participan
tienden a ser sinceros con su pareja y nunca buscan lastimarlas. Por eso desde
un principio se establecen con claridad las reglas de esta forma de
relacionarse en el amor. (Fricker
y Moore Op cit).
Todos los autores coinciden, en que el
estilo de amor Ludus está enfocado, a que las relaciones de la pareja existan
sin compromisos y que de esta manera todo lo relacionado al sexo sea visto,
únicamente como un pasatiempo lúdico, por ambas partes. Es un estilo de amor
que se caracteriza, porque en la relación de las parejas prevalece el deseo de
no causarse daño.
STORGE: Es un
estilo de amor pausado, gradual, que se involucra lentamente en una relación de
amor por placer, porque generalmente las personas que aman de esta manera,
prefieren en un principio la amistad y el afecto, en vez del amor físico y el
placer sexual. Es un estilo en que se buscan encuentros agradables y
relajados, similitud con la pareja y que
a través de compartir intereses, se logre establecer una relación primera de
confianza entre ellos: es un amor de compañeros, de amigos y la actitud ante el amor se desarrolla de
forma lenta, basándose en el cariño y la
amistad de la otra persona, cita Sánchez (Op cit.)
Por su
parte, Loving (Op cit.), señala que este estilo
es un afecto que se desarrolla poco a poco y se caracteriza por la
amistad y el afecto; y que por lo regular son parejas que les disgustan el
éxtasis y las sorpresas, por lo que son personas que no están en búsqueda del amor, sino del mejor
amigo.
PRAGMÁTICO:
Algunos le llaman sencillamente Pragma y su sentido parece
claro. Es la forma que adopta el amor en aquellas personas que eligen
cuidadosamente a su pareja. Forma de
amor calculada, educada, tradicionalmente aceptada por grupos sociales que
conservan muy presente a la razón, por encima de la pasión. Amor que hace consciente
las cualidades deseables en la pareja y las evalúa, con la finalidad de evitar conflictos y
mejorar la relación. Búsqueda de compatibilidades no solo físicas sino también
de intereses. Estas parejas consideran fundamental el elegir de manera adecuada
a su pareja y ven el amor como algo práctico.
Fricker
y Moore (Op. Cit.), mencionan en su clasificación, que este estilo
de amor de pareja es permisivo, el sexo se ve como un juego de dos, intermedia
un sentido amistoso, en donde existe confianza, pero sobre todo cariño entre
ambos.
Por su
parte Loving (Op cit.), menciona que este estilo también se basa en la creencia del amante de que
posee el control absoluto de la relación y
donde el principal requisito es que la otra persona, comparta las mismas
características, esperando reciprocidad y considerando que la compatibilidad sea algo que se tiene
que trabajar.
En
realidad, ambas opiniones parecen contradecirse, ya que uno hace mención del
estilo Pragmático, enfocado hacia el juego y la permisividad y el otro, en
cambio, intenta definir el estilo con base al control y reciprocidad.
MANÍA: Quienes
se enrielan en este estilo de amor son posesivas, dependientes, inestables y padecen
de grandes conflictos emocionales. Son
personas que muestran conductas que invaden el espacio de la pareja. Y que se
caracterizan por demostrar la existencia de celos, falta de comunicación y
dolor. Como en el alcoholismo, la
Manía de amar de esta manera, desaparece con la causa que lo
origina. Amor turbulento, apasionado, se puede afirmar sin duda que es un
estilo de amor emocionalmente intenso.
Fricker y Moore (Op cit.), mencionan
que las personas amadas de esta manera, están constantemente en
el pensamiento de la pareja, quien tiene una necesidad desesperada de ser amada
y también hay una necesidad de ser asegurada de este amor constantemente.
Loving (Op cit.), menciona que esta clase de amor es una combinación entre el
estilo: Eros y Ludus, en donde es similar al apasionamiento y se caracteriza
por una preocupación intensa, sumamente obsesiva y vigilante hacia el objeto
amoroso. En su concepción, es un estilo que necesariamente implica dificultad y
dolor.
Para los
amantes de esta forma, les queda bien la sentencia de que “es mejor perderse en
la pasión, que perder la pasión”, como sucedería en el amor Pragmático. Es el
estilo de amor que con mayor frecuencia se promueve como ideal y sueño de
prototipo comercial a seguir.
ÁGAPE: En este
estilo de amor hay una tendencia a apoyar a la pareja, a comprender su carácter
y a perdonar las fallas o defectos. Es un estilo amatorio que antepone las
necesidades del otro a las suyas propias. Estas personas aman de manera intensa
hasta llegar a convertirse en grandes amigos
de su pareja, apoyándola en todos los sentidos y entregándose
completamente a ella. Son amantes que tienen la cualidad del altruismo (hacer
el bien), por lo que anteponen las necesidades de sus seres (objetos) amados,
ante las propias.
En este
estilo de amor existe una mutua relación con los estilos Eros y Storge: por el deber o la obligación por
cuidar a la otra persona, por ser un amor, desinteresado, altruista, compasivo
que tiene una auténtica preocupación por lo otro. La razón y la obligación
siempre prevalecen ante el deseo y la emoción. La motivación fundamental de
este amante es el compromiso, dicen Fricker y Moore, tanto como Díaz Loving. Se puede afirmar que este estilo de amor, se
caracteriza por la comprensión y el
cuidado, por el apoyo mutuo y el perdón por defectos de la pareja.
1.4.-
COMPONENTES DEL AMOR SEGÚN STERNBERG.
·
La Intimidad, es entendida
como aquellos sentimientos dentro de una relación que promueven el
acercamiento, el vínculo y la comunicación.
·
La Pasión, es aquel estado de
intenso deseo de unión con el otro, como expresión de deseos y necesidades.
·
El Compromiso o
Decisión, es concebido como la decisión de amar
a otra persona y la intención de mantener ese amor.
A partir
de lo anterior, el profesor Sternberg (1949) se plantea la inexistencia de
relaciones amorosas “puras” o motivadas por una sola causa y será, a través de
la combinación de los tres elementos esenciales que se manifiesten las
siguientes siete formas de amor (ver figura).
·
Cariño: Es el cariño
íntimo que caracteriza las verdaderas amistades, en donde se siente un vínculo
y una cercanía con la otra persona, pero no pasión física ni compromiso a largo
plazo.
·
Encaprichamiento: Es lo que
comúnmente se siente como «amor a primera vista». Sin intimidad ni
compromiso, este amor puede desaparecer en cualquier momento.
·
Amor vacío: No hay amor, no hay ni pasión ni intimidad, pero se da esta forma de
relación por la existencia de algún tipo de compromiso y de respeto.
·
Sociabilidad o Compañía: Se
encuentra frecuentemente en matrimonios en los que la pasión se ha ido, pero
hay un gran cariño y compromiso con el otro. Suele suceder con las personas con
las que se comparte la vida, aunque no existe deseo sexual ni físico. Es una
forma de amar que se encuentra en la familia o en aquellas amistades que pasan mucho tiempo junto, en una relación
sin deseo sexual.
·
Sociabilidad o Compañía: Se
encuentra frecuentemente en matrimonios en los que la pasión se ha ido
·
Amor Romántico: Es la forma de amar que entrecruza la intimidad y la pasión. Suele ser
el tipo de amor que más frecuentemente surge entre los jóvenes.
·
Amor Fatuo: Más apropiado es llamarle a este tipo Amor de Vanidad o como le
nombraba Stendhal (1968), Amor de Puntillo o enfermedad del honor. Es una
relación intensa, caracterizada por el deseo de reconocimiento de la pareja, de
corta duración por lo general
·
Amor Consumado. Finalmente la joya de la corona es el amor consumado. Lo que la
filosofía clásica entendía como el amor virtuoso: aquel que contiene el placer, el interés, el bienestar y la
correspondencia reciproca de los amantes.
Cooper y
Pinto (2008), mencionan que no puede existir
pasión, intimidad ni compromiso;
si no existe amor, por lo que estos tres
componentes son básicos para una buena relación de pareja de lo contrario,
agrega Sternberg no puede existir amor
en ninguna de sus manifestaciones.
ADOLESCENCIA
“A
todos, en algún momento, se nos ha revelado nuestra existencia como algo
particular, intransferible y precioso. Casi siempre esta revelación se sitúa en
la adolescencia. [...] El adolescente se asombra de ser. Y al pasmo sucede la
reflexión: inclinado sobre el río de su conciencia se pregunta si ese rostro
que aflora lentamente del fondo [...] es el suyo. La singularidad de ser –pura
sensación en el niño se transforma [...] en conciencia interrogante”. El
Laberinto de la
Soledad Octavio Paz (2009).
2.1.- ANTECEDENTES DE LA ADOLESCENCIA
Es la
etapa que marca el proceso de transformación del niño(a) en adulto, es el período de evolución;
que tiene características distintas. Se
le llama adolescencia, porque sus protagonistas son jóvenes de identidad y de
una clara definición, en donde ya no son totalmente niños(as), pero tampoco son
adultos, por lo que son una especie de híbrido, con rasgos de adulto y resabios
de niño. Para Erickson, (1972), el adulto joven se mueve entre la
intimidad y el aislamiento, en una etapa en que la persona está dispuesta a
fundar su identidad, con la de otros. Está preparado para la intimidad, se
tiene la capacidad de entregarse a afiliaciones y asociaciones concretas y de
desarrollar la fuerza necesaria para cumplir con tales compromisos, aun cuando
impliquen sacrificios significativos. La afiliación y el amor son las virtudes
o fortalezas que se asocian a esta etapa. Hay construcción y establecimiento de
un estilo de vida, se organiza la vida de forma práctica, se llevan a cabo
propósitos.
Es
relevante en la etapa del amor adolescente el descubrimiento de la intimidad; es
una fase donde el adolescente exige establecer compromisos, ya sea con los amigos
o con la pareja de la que se enamora, a cambio de renunciar a otras alternativas
que compitan con las relaciones que construye. Todo un proceso que requiere
conciencia, educación, orientación, negociar incluso para desarrollar la
identidad propia de pareja, como
proyecto en común primero, a pesar de que estos proyectos lleven a confusiones
de identidades Martson, Hecht, Manke,
McDaniel, y Reeder (1998).
La
adolescencia es una etapa de transición que no tiene límites temporales, y los
cambios que ocurren en esta etapa son tan significativos que resulta útil
hablar de la adolescencia como un periodo diferenciado del ciclo vital humano.
Este periodo abarca desde cambios biológicos, sociales, sexuales, físicos y
psicológicos, hasta los cambios de
conducta y status social, dificultando de esta manera precisar sus límites de
manera exacta. Este periodo se comprende, entre el final de la infancia y el
principio de la adultez. Por lo regular
comienza entre los 12 y 14 años en la mujer y en el hombre respectivamente y
termina a los 21 por lo general, Horrocks, (1993).
La evolución que los muchachos viven en esa etapa, los hace
entrar en crisis, pues se encuentran en la búsqueda de su propia identidad, en
el proceso de configurar su personalidad. Muss, menciona que
la adolescencia es una etapa de la vida, por la que todo ser humano pasa presentando
durante los mismos cambios físicos, psicológicos y cognitivos.
Desde un
punto de vista etimológico, la palabra adolescente, proviene de la voz latina adoleceré
que significa crecer o desarrollarse hacia la madurez. Aunque muchas veces se
asocia la raíz de la palabra adolescente con adolece, de dolor, esto es un
error, pues adolecer proviene de otra locución que es adolere. Es más
interesante la relación que se asocia con ad olere, que en Roma se
empleaba para llamar así a los jóvenes que llevaban ofrendas olorosas a sus
dioses y aun se discute si es correcto también, este origen de la palabra
adolescente, como el que despide olor y representa algo sagrado.
La
adolescencia se define como una etapa en
que la persona descubre su identidad y
define su personalidad, se manifiesta
por una crisis en la cual se replantean los valores adquiridos en la
infancia y se asimilan en una nueva
estructura más madura. A lo anterior se puede agregar que la adolescencia es la
etapa en que el adolescente presenta muchos cambios, en búsqueda de su
identidad, así como la madurez necesaria ante determinadas conductas.
2.2.-
DEFINICIÓN DE ADOLESCENCIA.
E. Hurlock
y D. Papalia, mencionan que la adolescencia es un periodo de transición en el
cual el individuo pasa física y psicológicamente desde la condición de niño a
la de adulto, caracterizándola de la siguiente manera: “la adolescencia es más
que un peldaño en la escala que sucede en la infancia”. Por lo que es un
periodo de transición constructivo, necesario para el desarrollo del yo; es una
despedida de las dependencias infantiles y un precoz esfuerzo para poder
alcanzar lo que es el estado adulto.
El Dr.
Emilio Mira y López, dicen que “La adolescencia es el periodo de crecimiento acelerado, el llamado estirón, que separa a la niñez de
la pubertad”, apoyando a esta definición
Maurice Debesse, la conceptualiza de manera general como: “Las
transformaciones corporales y psicológicas
que se efectúan entre la infancia y la edad adulta. Para él, la pubertad
es particularmente la aparición e instalación de la función sexual”.
Semmens,
Kermit y Krantz (1998), plantearon que el momento en que inicia el crecimiento
y desarrollo de la adolescencia, se hace de manera individual, que cada
individuo a su debido tiempo logrará una construcción corporal adulta y no hay manera de predecir a qué edad
va a presentarse en cada uno. Un adolescente puede o no manifestar su interés y
preocupación por los cambios corporales que le estén ocurriendo, su conducta
puede variar; desde la preocupación, hasta la
actitud de indiferencia respecto a su apariencia física.
En
nuestro país, menciona Espinoza (1999), en la mayoría de las personas predomina la idea de concebir a la
adolescencia como una etapa de la vida,
que se inicia más o menos entre los 12 y 13 años y termina
aproximadamente a los 20 años. Algunas características comunes en las y los adolescentes de México,
son que generalmente están incorporados a instituciones educativas, algunos de
ellos se dan la tarea de buscar empleo,
la mayoría aun dependen económicamente
de los padres, sienten apego a un grupo de adolescentes y en particular a una
persona del sexo opuesto.
La
adolescencia, es una etapa de la vida que forma parte del desarrollo de los
seres humanos, y que se caracteriza por la intensidad con que se presentan los cambios, biológicos, psicológicos y
sociales, y así mismo definen la forma de pensar y actuar de los
adolescentes. Los cambios físicos constituyen un proceso biológico denominado
pubertad, a través de los cuales, los adolescentes adquieren madurez
sexual (Espinoza, Op cit).
Muchos
autores tienen diferentes maneras de
entender a la adolescencia, pero en
general todos están enfocados hacia lo mismo ya que, la adolescencia es una de
las etapas en las que el individuo se va desarrollando y va presentando cambios,
los cuales los hacen unas personas maduras en todos los ámbitos, desde los
físicos hasta los emocionales y donde demuestran una preocupación por la forma
de actuar ante la sociedad, la forma en cómo conquistar a las personas del sexo
opuesto, el desarrollo de cada parte de su cuerpo y la preocupación por la
madurez ante la sexualidad. La adolescencia también podría llamarse el momento
crucial en la vida del ser humano, en donde se manifiesta un proceso de
desprendimiento.
2.3.- SURGIMIENTO Y
EVOLUCIÓN DEL AMOR EN LOS ADOLESCENTES
Durante
el periodo de la adolescencia los jóvenes comienzan a experimentar sensaciones
nuevas, extrañas para ellos, y que normalmente perturban y confunden su
existencia. De esta manera es como poco a poco los adolescentes van
desarrollando su capacidad generativa, y
con ella, a despertar sus instintos
sexuales, que es cuando comienzan a buscar juegos y a reunirse con grupos de
amigos de su mismo sexo, procurando llamar la atención de los demás.
Así es
como van surgiendo sentimientos afectivos en las relaciones con algunas
personas del sexo opuesto, dejando los juegos, para entrar a establecer relaciones de amistad, de diferentes estilos.
En esta etapa el joven ya es capaz de
enamorarse de verdad, de poder querer a la otra persona con la que incluso
podría formar un hogar en un futuro; pero para que esto suceda primero que nada
deberá recorrer un buen proceso en el tiempo, hasta madurar su capacidad de
poder amar, predominando primero los sentimientos vivos, las emociones
repentinas que de muchas maneras llegan a desconcertar a quien las padece,
aunque experimente el contento de sentirlas. Y poco a poco el amor se va haciendo más profundo y sólido,
que parece centrarse en una visión especial que se entiende como propia de la
realidad, porque ahora se le acepta con virtudes y defectos. Hasta llegar a lo
que es el proceso de la maduración personal para
establecer adecuadamente una relación de pareja estable.
2.4.-
AMOR DE ADOLESCENCIA.
Para
Jeffrey Z. Rubín (1980), el sentimiento
del amor está formado por las
dimensiones del amar y del gustar. Ya que amar se refiere a la atracción
física, predisposición para ayudar, desear compartir emociones y experiencias y
al sentimiento de exclusividad y absorción. Gustar por su parte, está
relacionado con las relaciones interpersonales e incluye sentimientos como el
respeto, la confianza y la percepción de que la persona amada tiene objetivos
semejantes a sus propios sentimientos.
Otros
como Hazan y Shaver, (1987), mencionan que el amor es como
una relación de apego, que influye en las relaciones de amor, basándose en la
atracción sexual y el cuidado mutuo. Pero las relaciones que se dan en la
adolescencia, más que nada se caracterizan por un vínculo emocional, que se
experimenta con la pareja y sobre todo por que brinda seguridad. Además, el comportamiento ante el amor se centra en
mantener un sentimiento mutuo con la pareja, que pasa a constituir la base de seguridad, frente al
medio que los rodea.
Alguna
vez todas las personas han experimentado el amor durante la adolescencia.
Igualmente que se ha llegado a querer a los
padres, hermanos amigos, mascotas, ídolos
musicales o deportivos. Pero el tipo de amor que se descubre en la
adolescencia, parece muy diferente a todos los demás sentimientos de atracción
y afecto que los adolescentes habían sentido con anterioridad, en comparación
al hallazgo que ahora comienzan a conocer con personas del sexo opuesto.
Algunos
como el Dr. Stanley Hall, mencionan que el amar y que amen a uno mismo es una forma de enriquecer la vida de cada
persona, por lo que también es una manera de mostrar importancia y sobre todo
seguridad para seguir adelante. Para muchos jóvenes adolescentes, las
relaciones sentimentales se establecen sobre todo para pasársela bien. Como una cuestión de status, aunque
no sea verdaderamente una forma simple de amar, pero si un estilo divertido y
de juego.
Sin
embargo, Grinder (1999), señala que al ir finalizando la adolescencia, las
relaciones amorosas ya no se logran establecer como para poder salir con
alguien, sino para poder incorporarse en un grupo de amigos, Este autor supone
que para que exista amor en una pareja, es importante que se den los tres
vértices del triángulo: el compromiso, la intimidad y la pasión. Solo así podría configurarse entre
ambas personas un amor duradero y estable.
Otro
factor que interviene de manera importante en el enamoramiento, que se presenta
al inicio de las relaciones, es que la mayoría de las veces el amor es una mera
ilusión, solo una distorsión de la percepción individual. Es frecuente que se
exageren las cualidades, y se imagine que la otra persona es la pareja ideal
para compartir el resto de la vida. Esta clase de eventos normalmente
desaparecen al paso del tiempo, al extinguirse el encantamiento inicial, por
descubrir la esencia real de la persona. Un hecho que sucede casi siempre es
que las formas y estilos del amar adolescente son retratos o huecos que los
enamorados tratan de repetir o de encubrir, de resolver de acuerdo a las
donaciones o a las carencias afectivas que se vivieron en la infancia.
Para
muchos, en cambio el enamoramiento abarca a la persona total: cómo es, cómo
habla, cómo camina, qué
dice, su nivel de seguridad y confianza en sí misma, su capacidad de escuchar,
de entender y de aceptarse tal cual es, sin miedo a no agradar a los demás.
2.5.-
PERCEPCIÓN DEL AMOR MEDIANTE EL GÉNERO.
Idealizar el amor perfecto según la percepción que cada
sujeto tiene, ocasiona diversas recompensas románticas, las cuales pueden a
veces, perjudicar la relación sentimental. Se ha demostrado que las situaciones
amorosas que se manifiestan en muchas recompensas románticas (tales como la
belleza, virtudes, detalles) pueden provocar frustración y falsas expectativas
acerca del amor y que generalmente se encuentran muy lejanas a la realidad,
Pedreira y Tomas, (2001).
Por ello, cuando en la adolescencia se comienzan a
presentar las relaciones sentimentales, muchas de las veces los adolescentes no
saben cómo demostrar sus sentimientos, hacia la pareja que les atrae, ocasionando un proceso
que les provoca frustración y los hace que piensen y actúen de una manera
diferente ante su pareja, porque se dificulta establecer vínculos de
comprensión hacia los demás.
Es importante entender ahora de qué manera es como los adolescentes,
pueden saber y opinar acerca del amor: considerando la naturaleza de la
adolescencia, los estilos del amor, la educación aprendida en la casa, el amor
recibido, entregado, los ideales de cada uno de los y las jóvenes, así como las
diferentes percepciones acerca del amor y a
que cada uno de ellos se inclina hacia lo que sienten y lo que su pareja les demuestre,
para sentirse amados.
2.5.1.-
EL AMOR EN LA MUJER
ADOLESCENTE.
Hay quien dice que el amor para las mujeres
adolescentes, es el sueño máximo de su vida y que por amor sacrifican estudios,
familia, principios, “todo”. Creo que no es el caso en estos tiempos, ni en
este Sur del Estado de México. Todavía habrá muchas, si, que sueñan con amar de
verdad, sin fijarse en nada ni nadie más; según este entender, las adolescentes
enamoradas sólo comen y respiran pensando en el “dueño de su corazón” y
aguantan de todo "Por amor" En Adolescencia y Vida de Espinoza y
Carbajal, (Op cit.) se menciona que el amor para una mujer adolescente es aquel chico ideal que le da apoyo, que
cumple su rol de ser sólido y seguro en lo que hace, un refugio seguro. A
cambio ellas dan cariño, amor, pasión y también apoyo, siendo este el ideal de
todos.
Prevalece la idea de que el amor, para las chicas adolescentes es aquel
sentimiento que le da sentido a su vida. Mejor si el enamoramiento proviene de
una persona que las ame, las respete, que sean atenta, amorosa, cariñosa, que
las comprendan si es posible en todo- pero mejor aún, se comprometan a poder hacerlas felices. Autores como Gaja (Op cit.) se recrea en
explicar cómo las chicas siempre han sido catalogadas como sumisas, asumiendo
una posición mental y emocional de dependencia, pudiendo participar en su
activa esclavitud.
Mas continua muy arraigada en el sur de México, la idea
de que las chicas adolescentes piensen que amar a un hombre y abandonar sus
sentimientos por él estimulan su fuerza personal. Como si el único sentido
teleológico de su presencia universal se redujera ser reproductivos y
creativos, un miembro participativo de la sociedad y una pareja enamorada. Para esta clase de adolescentes, que son una
gran mayoría, el encontrar al hombre para enamorarse requiere entre otras cosas
no competir con ellos, porque se puede amar y mantener o acrecentar incluso las
capacidades de creación, formación profesional y mantener el estímulo para amar a su pareja.¹
¹ Tal vez sería conveniente revisar
la película Un Año Perdido, que aborda precisamente los temas de esta
investigación: amor, adolescencia, preparatoria y Tejupilco. Cinta
galardonada, que trata sobre una joven
adolescente, originaria de esta localidad, que enfrenta el reto y la
posibilidad de estudiar la preparatoria en Toluca, pues en 1976, que es el año
en que se ambiento esta película -dirigida por Gerardo Lara y galardonada con
un Ariel por la mejor música “Las piedras rodantes” del TRI- no existía aun esa
oferta educativa en esta población sureña. Interpretada por Vanesa Bauche y
Tiare Scanda. La trama da inicio cuando la protagonista, Matilde Campuzano,
recibe un telegrama, donde le notifican que ha sido aceptada en la
preparatoria, lo que la lleva a terminar su relación amorosa con Pedro –Damián
Bichir-, el clásico novio que solo la quiere para el rol que, por desgracia,
muchas “muchachas” de esta región, aún ven como destino obligado: casarse.
2.5.2.- EL AMOR EN EL HOMBRE ADOLESCENTE
Hay quienes entienden que el amor para los jóvenes adolescentes, consiste
en el poder encontrar una chica que
reúnan todas las expectativas anheladas, pero que sean también tranquilas, inteligentes, responsables,
cariñosas y amorosas Encontrar a la chica ideal que los esperen mientras los
muchachos “hacen lo que quieren con sus vidas” ²
Mas los síntomas generales son que el amor en el joven
adolescente consiste en encontrar compañía, tener alguien que lo escuche y participe
de sus sueños; alguien a quien abrirse,
con la cual se pueda transformar en algún tipo de icono imaginario, una figura de apetencia
deseada. Es de suponerse que a cambio, el chico ofrecerá la seguridad,
paciencia y sobre todo el apoyo, que se supone es lo que un adolescente varón
debe de dar. De acuerdo a Elena Duque, (2006).
La decisión de tener algo estable siempre da miedo a los jóvenes. Es algo
instintivo, por muy bien que este con una chica, aclara Duque, el adolescente siempre
pensará que en que deberá atarse para
siempre y “sentar cabeza”. Poder asumir responsabilidades es una cuestión de
madurez y, en general, los muchachos, tienden
a retrasar el momento de la unidad definitiva, lo más posible que se pueda.
Los
jóvenes adolescentes, según esta autora, esperan inconscientemente que la chica adolescente responda a sus
requerimientos amorosos, todas las veces que a él le apetezca; y que aunque afirme el varón, conscientemente
que le agradaría que ella, la mujer adolescente alguna vez asuma la iniciativa
con la misma intención que lo hacen los chicos, se supone que muy en el fondo,
el tener la iniciativa es propio del rol natural del adolescente. El chico avanzar hacia la chica
y el de ella someterse o retroceder. Hasta aquí el hablar de
adolescencia.
² Pareciera que el amor entre los
jóvenes adolescentes estaría entonces detenido en el siglo XVII, al tenor de
las redondillas de Sor Juana Inés de la
Cruz: Queréis, con presunción necia; hallar a la que buscáis;
para pretendida, Thais; y en la posesión, Lucrecia…
MÉTODO
El método empleado para esta
investigación consiste en el análisis estadístico descriptivo de manera
comparada, de las respuestas proporcionadas por un grupo de estudiantes tal y
como se describe más adelante. Los estadígrafos a calcular tienen como
objetivo, conocer el comportamiento del amor, para este universo determinado,
de acuerdo a los seis estilos de amor descritos y a los tres componentes, del
amor de la teoría triangular del amor de Sternberg.
3.1 Objetivo General.
Conocer
el comportamiento del amor en hombres y mujeres adolescentes de -ya sea con pareja o sin pareja-, inscritos
como estudiantes de la
Preparatoria regional de Tejupilco A.C., de acuerdo a la
clasificación del amor descrita en el capítulo primero: Eros, Ludus, Ágape,
Pragmático, Manía y Storge; y con base en el Triángulo del Amor de Sternberg.
3.2 Objetivos Específicos.
·
Identificar por
sexo a los estudiantes con pareja y sin pareja.
·
Determinar el
estilo de amor de acuerdo al género.
·
Determinar el
nivel de intimidad de acuerdo al género.
·
Determinar el
nivel de pasión de acuerdo al género.
·
Determinar el
nivel de compromiso de acuerdo al género.
·
Comparar el
nivel de pasión de acuerdo al género.
·
Comparar el
estilo de amor de las mujeres con y sin pareja.
·
Comparar el
estilo de amor de los hombres con y sin pareja.
·
Comparar los
estilos de amor entre hombres y mujeres con
pareja.
·
Comparar los
estilos de amor entre hombres y mujeres
sin pareja.
3.3.-
Planteamiento del Problema
¿Existen diferencias en los
estilos de amor entre jóvenes adolescentes de Tejupilco, con base en las
diferencias de género y considerando el estado afectivo en que se encuentran
sus relaciones, de pareja o por no tener pareja?
En México el amor es un concepto utilizado de
manera amplia y frecuente. Sucede lo mismo en el municipio de Tejupilco, sin
que hasta la fecha se cuenten con estudios que ayuden a entender este
sentimiento, fundamental para la salud mental de la sociedad.
Tampoco se ha analizado
suficientemente la percepción del amor en la etapa adolescente de la juventud
mexicana, no obstante ser la edad en que nace, se desarrolla y evoluciona el
sentimiento que da origen a la reproducción social, a la felicidad de la
comunidad o en su defecto a la tristeza y la ruptura del orden amoroso.
Se
puede, desde ahora aventurar que la mayor parte de las veces quienes enfrentan
este tipo de experiencias, son precisamente los adolescentes, por estar en la
búsqueda del objeto amado. El adolescente sufre o goza el proceso de la
elección de la pareja, de la otra persona que debe de reunir
todas las expectativas que los amantes adolescentes han de considerar indispensables,
para atreverse a establecer una relación de amor, para expresar entonces los
sentimientos de cada quien y así conseguir sentirse satisfechos con su elección.
Porque el amor es un sentimiento estable de satisfacción, que
guía los pensamientos y las conductas dentro de una relación de pareja. Porque
no se cuenta con la madurez para enfrentar este tipo de relaciones. Porque
cuando no se logra tener a la persona idealizada o la persona correspondida
se generan sentimientos nocivos como la
culpa. Porque el deseo de amar se
confunde con el afecto a la familia, a los amigos, a uno mismo y el adolescente
se enfrenta a múltiples cambios trascendentales Porque los jóvenes que sientan
que no son amados, pierden autoestima y disminuyen su amor propio. Porque como
se ha señalado el amor involucra la imaginación con la pasión, con la realidad
y tantas variables tales como el agrado hacia la otra persona, comprensión,
entendimiento, habilidades de
convivencia, admiración, confianza, respeto, aceptación por parte de la otra
persona, actitud y sentimiento. Finalmente, porque hay que considerar que el
amor no solo depende de factores evolutivos, sociales e interpersonales, sino
también de las propias características del cada individuo. Nuevamente cabe
repetir la pregunta inicial que da origen a esta investigación: ¿Existen
diferencias en los estilos de amor entre jóvenes adolescentes de Tejupilco, con
base en las diferencias de género y considerando el estado afectivo en que se
encuentran sus relaciones de pareja o por no tener pareja?
3.4 Variables o Categorías
Las variables son aquellos
conceptos empleados para intentar explicar un fenómeno determinado. Hay
variables independientes y variables dependientes. Las variables pueden asumir
distintos valores, pero todas se pueden medir, cambiar y estudiar en una
investigación. Las variables pueden ser definidas conceptual y
operacionalmente. La definición conceptual es de índole teórica, mientras que
la definición de la variable operacional, depende de las bases para su
medición y definición de indicadores,
(1995).
3.5 Variables de Estudio
Definición conceptual: El “Amor” es la variable que depende en este
caso, de las respuestas proporcionadas por los estudiantes encuestados, que
pasan a ser las variables independientes de este estudio.
Definición Operacional: Se aplicó
un cuestionario para conocer la respuesta
de la población objeto de estudio, a las categorías determinadas en la escala
triangular del amor de Sternberg (intimidad-pasión-compromiso) y a la
clasificación del amor por estilos (Eros, Ludus, Ágape, Manía, Storge y
Pragmático).
3.6 Hipótesis
El término hipótesis o grupo de
proposiciones no demostradas, cuyo análisis puede llevar a una conclusión
lógica. Se le considera como parte de cualquier investigación o estudio,
(2004).
Ho: No existe diferencia estadísticamente significativa en los estilos ni en los componentes del
amor, entre hombres y mujeres de
preparatoria.
Hi: Si existe diferencia estadísticamente significativa
en los estilos y en los componentes del amor entre hombres y mujeres de
preparatoria.
3.7 Tipo de Estudio
El tipo de estudio que se utilizó
fue de tipo comparativo, que pretende observar diferencias entre medias de dos
o más grupos.
3.8 Población
La población se refiere al
conjunto para el cual serán válidas las conclusiones que se obtengan: a los
elementos o unidades (personas o cosas) involucradas en la investigación, (1994).
Para la presente investigación,
se retomó como población a los alumnos
que cursan el primero, tercero y quinto semestre de la escuela
Preparatoria Regional de Tejupilco A.C., la cual cuenta con un total de 295
alumnos, de los cuales 149 son estudiantes del sexo femenino y 146 del sexo
masculino y cuyas edades oscilan en un rango de 15 a 18 años.
3.9.- Instrumento o Técnica.
Como ya se indicó el instrumento
de análisis empleado corresponde a la
escala triangular del amor (ETAS),
diseñada sobre la base teórica de la escala de actitud ante el amor. Los
componentes identificados fueron: intimidad
(ítems 1- 15), pasión: (ítems 16 - 30) y compromiso (ítems 31 – 45). Las dimensiones de estilos de amor que señala
el cuestionario apuntan a un factor central disparador de cómo es la intimidad,
la pasión y el compromiso en las relaciones de pareja. Sin embargo, también se
hace anotación a las estrategias interpersonales utilizadas para cada relación
de pareja y así mantener o llevar una mejor relación estable, es decir, la
expresión afectiva hacia la pareja, la modificación de planes, la búsqueda de
atención y la expresión límite.
La escala resultante del
experimento arrojo primeramente que el indicador Alfa de Cronbach es de 0.92, lo que permite validar como
fiables y generalizables los resultados obtenidos, para conjuntos similares. Para
cada uno de los factores que se manejan en la escala triangular del amor, el
alfa de Cronbach arrojo lo siguiente: Intimidad: 0.951, Pasión 0.953 y
Compromiso de 0.967. Medidas todas ellas muy similares respecto a la muestra.
La escala consta de 45 ítems, por
cada uno de los tres componentes y se construyó en un formato tipo Likert, (escala bipolar que mide tanto el
grado positivo, neutral y negativo de cada enunciad) presentando un rango de 1 a 9, de acuerdo a las
siguientes opciones: nunca, bastante y extremadamente.
A partir de las
varianzas, el alfa de Cronbach se calcula de acuerdo a la siguiente formula.
3.10 Diseño de Investigación
El diseño de investigación que se
utilizó es no experimental, ya que se retomaron dos muestras independientes para llevar a cabo dicha
investigación (hombres y mujeres), además no se llevó a cabo la manipulación de
variables, solo se observaron los fenómenos en su ambiente natural, para
posteriormente analizarlos, e indagar la
incidencia y los valores que se manifestaron dentro de la variable “Estilos de
Amor”, en los estudiantes pertenecientes a ambos sexos. También se considera
que la investigación es del tipo descriptivo transaccional, porque la
recopilación de la información se dio en un tiempo único.
3.10.1.- Captura de Información
La recolección de datos se llevó
a cabo mediante la aplicación colectiva, del instrumento, la cual se realizó en
las instalaciones de la
Preparatoria, dentro de un horario escolar; para lo cual se
solicitó la participación voluntaria de los alumnos, aclarándoles que los
resultados obtenidos en la aplicación se manejarían en forma confidencial
con fines de investigación.
Para la aplicación del
cuestionario se solicitó permiso para realizar el llenado, en donde
posteriormente se dieron a conocer las instrucciones del cuestionario. El
tiempo para contestar el cuestionario fue de 20 a 30 minutos
aproximadamente por cada alumno.
3.11.- Procesamiento de la Información
·
Para este
proceso se utilizó la estadística descriptiva
que permitió en primer término ordenar los datos, los valores o
puntuaciones obtenidos.
·
Posteriormente
se aplicó el paquete SPSS para proceder
a calcular los valores de los estadísticos de la media y la varianza,
desviación estándar y la prueba “t” para
muestras independientes, que permitió obtener diferencias entre las medias con
relación al sexo y situación de pareja, tomándose un nivel de significancia de <
.05.
V.- DISCUSIÓN
Es necesario comenzar esta parte final de la investigación,
señalando que los resultados obtenidos, fueron suficientes y necesarios para
concluir que en la prueba de las hipótesis de trabajo, los datos estadísticos
arrojados por el modelo de Sternberg,
permiten explicar algunos comportamientos significativos, en los estilos
y componentes del amor entre los adolescentes de la Preparatoria Regional
de Tejupilco.
Por lo tanto se da por válida la hipótesis alternativa (Hi) que se
utilizó en esta tesis: Si existe diferencia estadísticamente significativa, en los estilos y en los componentes del
amor, entre los adolescentes estudiantes
de preparatoria, de acuerdo al género y a sus respectivos estados
sentimentales.
Puede observarse que en relación
a los componentes del amor -pasión, intimidad y compromiso- gana en las mujeres
el sentimiento de la pasión, cuya media es la más alta de los tres componentes
para ambos sexos; en cambio el sentido del compromiso figura como el componente
más relevante para el sexo masculino. Con un promedio de variaciones estandard
en las respuestas similares, se podría discutir la importancia que representa
el amor como un sentimiento placentero y el amor como un afecto que brinda
seguridad, en mujeres y hombres respectivamente. Con unos indicadores
prácticamente iguales en cuanto a la necesidad de intimidad, la preeminencia de
la pasión en las mujeres y del compromiso entre los hombres adolescentes, bien
podrían utilizarse estos resultados, para orientar y gobernar los naturales
instintos amatorios en los jóvenes, hacia la dirección correcta de la felicidad
plena
También son relevantes los
resultados que se observan en cuanto a los estilos elegidos para enamorarse, de
acuerdo al sexo: en los hombres es el estilo eros, seguido por el de ágape y luego el ludus; en cambio para las mujeres adolescentes, el estilo storge, tanto con pareja o sin pareja
es el estilo que se impone mayoritariamente en los resultados del modelo de
Stenberg, seguido por el estilo eros
y en tercer lugar el de ágape.
Es decir que si el componente más
significativo en el amor de las mujeres es la pasión, y en los hombres el
compromiso, tratándose de estilos, sucede que el erotismo es lo que manda en
los hombres y en cambio la amistad y el ritmo lento del estilo storge, el que
gusta entre las mujeres. En el hombre, ocupa un lugar relevante el juego y la
ausencia de compromiso, como estilo de enamoramiento, no obstante que haya sido
el compromiso, el componente que más se
observo en el triangulo amoroso, para el sexo varonil. Por su parte, la pasión como ingrediente
significativo en las mujeres, se ve cruzada con el estilo storge, que se
caracteriza por el ritmo lento, paso a paso que se impuso a los demás estilos.
No obstante los resultados cambian
significativamente al comparar a las mujeres con pareja y las que no la tienen:
en este caso, aunque el estilo storge es el de más elevada incidencia promedio, se observa que el estilo
pragmático en la mujer, es la tipología amatoria que demuestra mayores
contrastes, cuando tienen pareja que cuando no.
Y asalta la duda y surgen
preguntas, respecto a la manera en que se enamoran los adolescentes de
Tejupilco. Las razones que aparentemente
explican la insuficiente
efectividad de la metodología empleada, bien podría estar en las características propias de este
sentimiento, y por la naturaleza de la muestra seleccionada, que es aquella que
se encuentra en la etapa de la adolescencia, la del surgimiento y desarrollo
del físico y de las pasiones.
De antemano, parece que el
problema parte desde los objetos que se pretenden estudiar: el amor y la
adolescencia. Un sentimiento y una etapa de la vida que reúnen muchas
definiciones e interpretaciones.
Del amor se dice que es:
emociones, complejo (Rozzana. Sánchez), vinculado a alegrías, decepciones, es
positivo, media la voluntad (Fromm, Pelee, Brodsky) y que el mismo Sternberg
define, cuando habla del amor, como una emoción intensa y deseable, capaz de
llevar a la muerte real o imaginaria. Que es abrumador, implica intimidad,
pasión y compromiso y que varía de acuerdo a las condiciones culturales, a la
geografía del amor y al momento histórico de que se trate.
Si en la década de los años 60’s
la consigna de la juventud se resumía en la frase Make love not war, hoy
existen corrientes poderosas que relacionan al acto de amor con la castidad y
el matrimonio. En verdad el amor es algo muy complejo. Otros autores revisados
para elaborar esta tesis, como Montagu, Gaja, Ubillos o Zubieta se recrean en
definiciones y juicios que intentan entender al amor como un instinto
protector, incondicional, físico, emocional, que da, que recibe, quita, alivia,
cura. Aunque es unánime la opinión en un punto: es muy difícil amar y más aun,
ser amado.
De tal manera que la diversidad de
opiniones respecto a la esencia del amor,
a los componentes simples y los estilos y tipologías utilizadas,
confrontadas con la contundencia de la conclusión de politólogos analistas del
amor, como Patricio Marcos, aunado a la
poca relevancia estadística, para medir, definir, concluir el sentimiento del
amor, lleva a formular interrogantes respecto a otras variables por considerar,
para entender y educar correctamente, al amor adolescente en México.
El otro componente de esta
investigación, la adolescencia es quizás tan confuso y subjetivo como el amor.
No solamente la parte que corresponde a la edad o a las manifestaciones físicas
del desarrollo de los cuerpos adolescentes. Más bien las confusiones se
presentan con el surgimiento de los afectos, las pasiones, los sentimientos, el
deseo y, en general todo aquello que compone el carácter del adolescente.
Los autores consultados respecto
a la adolescencia, como Jeffrey Z. Rubín o los trabajos de Hazan y
Shaver han podido demostrar aspectos importantes para entender esta
singular etapa de la vida: los sentimientos, gustos, predilecciones, valores,
atracción sexual, comportamientos y conductas frente la pareja; la elección y voluntad, los
vínculos y las necesidades de conocimiento tanto como de reconocimiento; el
apego, la amistad, el cariño, así como la importancia de la seguridad y
autoestima que brinda un buen amor. Hall y Grinder consideran en sus estudios
sobre la adolescencia que el amor enriquece la vida, que solo la presencia de
los tres vértices del triángulo de Sternberg puede traducirse en un buen amor
de pareja
Pero no
se puede olvidar que muchas de las veces, el enamoramiento en los adolescentes
-aunque no hay edades para el amor- comienza
como una mera ilusión, como una distorsión de la percepción individual.
Y que las formas y estilos del amar
adolescente tratan de repetir o de encubrir, las donaciones o a las carencias
afectivas que se vivieron en la infancia.
Creo
entonces, que estando suficientemente estudiado el amor y la adolescencia: por
la extensión de las definiciones, el origen etimológico de las palabras, los
casos analizados, la extensión de las interrelaciones que se presentan entre
cada concepto, hablo del amor y de la adolescencia, que los resultados
estadísticos obtenidos, en este trabajo realizado sobre los estilos del amor
entre la juventud adolescente de Tejupilco, la que estudia en la Preparatoria Regional
de Tejupilco A.C., ayuda a entender conductas, pero no alcanza a explicar a
satisfacción, el fenómeno como un todo. Es posible que sea necesario considerar
otras variables, otras teorías o quizás enfocándolo de otras maneras.
Si la
teoría del triángulo Sternberg no
alcanza a explicar los estilos del amor entre la adolescencia sureña, será
acaso ¿porque no hay nada que explicar? La realidad diría lo contrario: hay
dolores apasionados entre la juventud adolescente, tanto como embarazos no
deseados, proliferación de conductas nocivas, violencia, abandono,
desintegración familiar. El fenómeno de los jóvenes que NI estudian NI trabajan, bien se podría originar en la
ausencia de relaciones amorosas normales y en la buena salud mental que se
deriva, de mejores relaciones afectivas, de amistad y de pareja.
Variables
tales como la religión, las creencias y valores negativos transmitidos a través
de la televisión, la sobrevaloración del dinero y las riquezas, o la mala
educación y falta de cultura, pueden ser
causas que expliquen mejor los estilos del amor o lo que resulte de esta pasión,
en las conductas adolescentes.
VI.- CONCLUSIONES
A partir de la investigación de esta tesis, considerando los resultados
obtenidos y de acuerdo con la discusión que se presenta del conjunto del
trabajo, se concluyen los siguientes puntos:
Es de singular importancia realizar estudios como este trabajo, con
mayor profundidad, aplicándolo a poblaciones más numerosas y con más
frecuencia.
·
Es igualmente importante considerar otros instrumentos de análisis que
complementen la investigación de las
conductas amorosas entre la adolescencia.
·
Aunque no se logró demostrar en esta investigación que el triángulo de
Sternberg es suficiente para explicar los estilos del amor adolescente, si se
confirmó que por sí solo no lo es
·
Se requieren lo mismo otros instrumentos de análisis, que la
participación directa y consciente de padres, tutores y maestros en la
orientación de la juventud de Tejupilco. Tanto en la definición y cuidado de la
educación del adolescente, como respecto a las características y naturaleza del
amor.
·
Hay que inventar categorías específicas y apropiadas para analizar y
entender al adolescente y a los estilos del amor en Tejupilco.
·
Entender las relaciones de amor entre la adolescencia de Tejupilco,
requiere considerar la transmutación de los valores sociales, ocasionados por
la migración que ha experimentado esta población, los cambios en la conducta de
hombres y mujeres, la experiencia de la violencia y el crimen, el desempleo, la
mala educación recibida, y la baja formación cultural.
·
Sin espacios para expresarse, cine, teatro, estaciones de radio.
Convictos los adolescentes de las tradiciones que se repiten, de los
estereotipos de género que prevalecen. Trabajos como esta investigación pueden
ayudar a encontrar soluciones. Es un solo paso, en la dirección que se necesita
dar.
VII.- SUGERENCIAS
A partir de los resultados obtenidos en esta tesis, ha quedado debidamente
demostrado que el amor y la adolescencia son dos temas fundamentales para la
felicidad o la tristeza de la sociedad. Que la conciencia y la atención que se
dedique a este tema, será de suma importancia para ayudará corregir los graves
conflictos sociales que actualmente enfrenta la sociedad mexicana y en
particular, la adolescencia juvenil.
Por lo tanto una sugerencias que se podrían derivar después de realizado
este trabajo son las siguientes:
Ø
Aplicar la metodología
de este estudio desde una etapa más temprana de la educación escolar de los
adolescentes. Sería conveniente considerar el nivel de secundaria, como la
población objetivo para ser estudiada, en los estilos en que se da comienza a entender el amor.
Ø
Dado que la
metodología aplicada en esta tesis no resulta suficiente para explicar las
conductas amorosas, se sugiere ampliar el panorama de análisis, considerando
otras disciplinas y otras variables que pudieran tener incidencia en el
fenómeno del amor adolescente.
Ø
También se sugiere
seguir muy de cerca el papel que desempeñan en la educación de los
adolescentes, los respectivos padres de familia, así como los maestros
encargados de materias tales como la orientación o la atención psicológica.
Ø
A partir de la discusión
de los resultados ha quedado claro que el tema del amor en la adolescencia es
esencial en la salud y felicidad de los jóvenes y consecuentemente de la
sociedad. Por lo tanto se sugiere considerar la creación de talleres de
orientación sexual para los jóvenes adolescentes, para los padres de familia y
para los maestros y educadores.
Ø
Se sugiere igualmente hacer extensiva esta
propuesta de educación y orientación sexual a otros ambientes sociales como las
instituciones de educación superior,
centros de salud. Se considera como recomendación final atender con esmero,
cuidado y constancia todo aquello que se relacione con la amistad y el amor en
los jóvenes adolescentes.
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